lunes, 3 de noviembre de 2014

14 de Noviembre Día mundial de la Diabetes

El Día Mundial de la Diabetes (DMD) es la campaña de concienciación sobre la diabetes más importante del mundo. Fue instaurado por la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1991, como respuesta al alarmante aumento de los casos de diabetes en el mundo. En 2007, Naciones Unidas celebró por primera vez este día tras la aprobación de la Resolución en diciembre de 2006 del Día Mundial de la Diabetes, lo que convirtió al ya existente Día Mundial de la Diabetes en un día oficial de la salud de la ONU.

Su propósito es dar a conocer las causas, los síntomas, el tratamiento y las complicaciones asociadas a la enfermedad. El Día Mundial de la Diabetes nos recuerda que la incidencia de esta grave afección se halla en aumento y continuará esta tendencia a no ser que emprendamos acciones desde ahora para prevenir este enorme crecimiento.



sábado, 1 de noviembre de 2014

La violencia contra la mujer, una epidemia mundial.

Autor: José Carbonell

Existe una verdad universal, aplicable a todos los países, culturas y comunidades: la violencia contra la mujer nunca es aceptable, nunca es perdonable, nunca es tolerable, dijo una vez el Secretario General de la ONU. Con esta frase inicia un contundente informe, elaborado por la Organización Mundial de la Salud.

La violencia en contra de las mujeres no sólo es una flagrante violación de los derechos humanos, si no que se ha convertido en un importante problema de salud pública, sostiene dicho reporte. Basta con ver las cifras.

El 35% de las mujeres del mundo –más de una de cada tres– han sido víctimas de violencia física y/o sexual, la mayor parte a manos de su propia pareja. Casi un tercio de las mujeres que han mantenido una relación han sido víctimas de violencia física y/o sexual por parte de su pareja.

Un dato adicional –muy preocupante– es que este problema se inicia muy pronto: 30% de las mujeres de entre 15 y 19 años ha sido maltratada por su compañero o ex compañero sentimental.

Casi cuatro de cada diez homicidios femeninos son resultado de la violencia conyugal. Es decir, son perpetrados por las parejas o ex parejas. En el caso del Sudeste asiático, esta cifra alcanza más de la mitad de los crímenes contra mujeres: 55 por ciento.

 La propia Organización Mundial de la Salud sostiene que estas cifras resultan “alarmantes”, y la violencia física o sexual contra la población femenina es un verdadero “problema de salud pública, de proporciones epidémicas”.

No hay que olvidar que las mujeres que han sido víctimas de abusos físicos o sexuales por parte de su pareja corren un mayor riesgo de padecer problemas de salud importantes. En particular, se ha podido comprobar que estas mujeres tienen más del doble de probabilidades de sufrir un aborto o de caer en depresión; además son 2.3 veces más propensas a padecer trastornos relacionados con el consumo de alcohol.

 En México la situación es igualmente alarmante. Según datos del Inegi, casi la mitad (47.1 por ciento) de las mujeres mayores de 15 años han sufrido al menos una agresión por parte de su pareja sentimental. Si bien las cifras no son plenamente comparables*, ya que usan diferente metodología e incluyen diferentes conceptos, muestran con claridad que en el país existe un gran problema de violencia en contra de las mujeres.

Una conclusión que puede desprenderse del informe de la OMS para nuestros tecnócratas (y usando el frio lenguaje de los datos, que tanto les gusta), es que si no es por una cuestión ética y de derechos humanos, resolvamos este problema por razones económicas. Atender las consecuencias de la violencia en contra de las mujeres le está costando al sistema de salud miles de millones de pesos. Ya sea por una u otra razón, pero actuemos ya. Está pasando todos los días frente a nosotros. Qué estamos esperando. Urge.

Twitter: @jose_carbonell http://josecarbonell.wordpress.com

* Los datos del Inegi incluyen cuatro formas de violencia: la emocional o psicológica, que comprende actos que atentan contra la psique de la mujer, como menosprecio, intimidación, humillación, etc.; la económica, que son hechos encaminados a controlar los recursos económicos del hogar para presionar a la mujer, con acciones como amenazar con no aportar para los gastos domésticos, o criticar a la mujer por la forma en que administra tales gastos; la violencia física, que afecta la integridad corporal de la mujer, como empujones, patadas, golpes, aventones, etc.; y la violencia sexual, cuyo fin es la obtención de relaciones sexuales sin el consentimiento de la mujer.

Este contenido ha sido publicado originalmente por SINEMBARGO.MX en la siguiente dirección: http://www.sinembargo.mx/opinion/24-06-2013/15313.

La Parca llegó a Químicos Maldonado

Autor: Quim. Dorian L. Pinto

Nos olemos de antemano,
lo que les voy a contar,
porqué somos humanos,
aunque lo quiéramos ignorar.
No soy ágil pa´la hablada,
ni también muy bien trovado,
por eso digo de un principio,
pa´que estemos preparados…
Hoy nublado amaneció y
Tristes estamos todos
Pues la catrina visitó a
Químicos Maldonado.

Sorprendida y feliz
Por la puerta apareció
Pues la noticia escuchó,
Que la Lic Paty regreso.

Paso a paso se acercó
Sigilosa entusiasmada
Y con ese paso lento se llevó
A la  pobre licenciada.

La parquita ni se apunta
Con los de administración
Pues este año se llevó a
Más de uno al panteón

Encontró el Almacén
Con muchas irregularidades
y de un solo suspiro se llevó
A Manet por charales.

No esperaba nada a cambio
Solo quería trabajar
Como es tan chambeador
Se lo pasó a llevar.

El pobre Doctor Cesarito
ahora sí se nos peló,
se veía tan saludable,
siempre sonriente y amable,
cómo es que se nos petateó.
La Catrina remolona
ya le había echado el ojito
se dijo: este Doctorcito
lo subo a mi carretón

Por risueño y perfumado
pa’ que encienda mi pasión,
yo lo miro muy buen mozo,
limpiecito y retozón,
Nomás de oler su “perfume”
se le mueve hasta el calzón.
Ni tarda ni perezosa
del cuello se le colgó

Más Cesarito siempre fiel
se ponía muy remilgoso
escondiendo su trompita;
primero decía que no,

Pero  la huesuda cachondita
fué tanto lo que insistió
que al fin Cesarito no tuvo
Mas remedio y accedió.

En eso la Jefa Paty
Tremenda escena miró
diciendo: ¡Oiga!, ¡qué ejemplo!
y al pobre se lo surtió.

Le ponchó sus cachetitos
y la nariz le mordió,
más, fué tremendo patadón
que hasta el limbo lo mandó,

-condenada chaparrita-
¿de dónde fuerza sacó?.

Volteó pa´ reclamar a la dama,
pero la dama ya no estaba.
Sólo un trato en letras rojas
que en un pañuelo versaba.

“Tendrás oro y tendrás plata,
a cambio de que en un año
aceptes mi cariño.
Juro darte poca lata…
Amor  de ese que mata.”

Con La Fría no se trata,
porqué sólo nos embriaga,
y La Blanca no dilata,
en mandarnos a la fregada.
Antojitos mexicanos
don charrito traerá,
Con todita y su salcita,
Los podremos disfrutar.

Vende tortas y enchiladas,
Con un sabor sin igual.
Una orden le pidió la muerte
y Allí sentada se quedó.

De tanto que le gustaron,
Muchas otras más pidió
Y a la gente ella invitó
A probar ricas enchiladas
Que charrito preparó.

Por su sabor se olvidó
De lo que tenía pendiente
Y el momento aprovechó
Pa’ llevarse a mucha gente.

Una torta pa’ Rosita,
Una tostada pa’ Teresita
Y a charrito  me lo llevo
porque no pinta en este cuento.

Muy arrogante y ladina
todos la vimos llegar
es tan fea la catrina
que a todos puede espantar.

Vende dulces y galletas
por la tarde en el portal
pero ayer en bicicleta
a Karen vino a buscar.

Tocó el timbre muy fuerte
pero nadie respondió
y en medio de tanta gente
la Conta Alicia apareció.
Con su guadaña la muerte
se regreso a su panteón
esta vez no tuvo suerte
pues con Karen nunca dio.
Muy astuta la calaca
regresó sin enterarnos
y ayer por la mañana
pobre Karen… la enterramos.
Vuela, vuela palomita,
vuela, vuela sin parar.
Dile por favor a Karen,
que la vamos a extrañar.
Su visita ya anunciada
La esperaremos con ofrenda
Para ver si el año que entra
Nos perdona y no nos lleva.

Para cuando ya nos toque,
La podremos esperar,
Por lo pronto trabajemos
Para que nos puedan pagar.

Ya la flaca se despide,
Pues ya no queda ninguno,
Solo este chaparrito,
Que está hecho un papacito…

El papirrin le decían,
Porque al gimnasio llegaba
Pero  la huesuda lo vió
Y al panteón se la llevó.

Jardines del silencio le llaman,
O simplemente panteón,
Donde habita la Sra. Flaca,
Reina de la desolación.



Promoción de Noviembre 2014 El control está en tus manos


El Día Mundial de la Diabetes (DMD) es la campaña de concienciación sobre la diabetes más importante del mundo. Fue instaurado por la Federación Internacional de Diabetes (FID) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1991, como respuesta al alarmante aumento de los casos de diabetes en el mundo. En 2007, Naciones Unidas celebró por primera vez este día tras la aprobación de la Resolución en diciembre de 2006 del Día Mundial de la Diabetes, lo que convirtió al ya existente Día Mundial de la Diabetes en un día oficial de la salud de la ONU.

Alimentación infantil: pautas para que los niños de 1 a 3 años coman bien

Autor: María Abalo Gandía

Al nacer, los bebés pesan alrededor de 3 Kg. En tan solo un año, triplican su peso. Esta aceleración del crecimiento no se volverá a repetir en ninguna otra etapa de la vida.

Durante este tiempo, la mejor forma de alimentar a los bebés es la lactancia materna exclusiva, al menos hasta los 6 meses y alternarla con otros alimentos hasta los 2 años
.
Con la introducción a la alimentación complementaria, los bebés suelen empezar a interesarse por la comida, sobre todo cuando ven comer a otras personas. De ahí la importancia de sentarse juntos a la mesa, ya que los niños aprenden por imitación.

Y es en el entorno familiar donde los padres intentamos inculcarles unos hábitos de alimentación adecuados. Si los niños ven que los padres comemos de todo, estamos ayudando a evitar los caprichos y a introducir los distintos alimentos de forma habitual en su dieta diaria. Al principio, lo más importante es que los niños disfruten comiendo y que esta experiencia resulte agradable y positiva para ellos.

En la etapa de 1 a 3 años, los niños aumentan entre 2-2,5 Kg por año. Durante el segundo año crecen 12 cm, el tercero 8-9 cm y a partir de esta edad 5-7 cm cada año. Esta desaceleración del crecimiento repercute en su apetito. Y si hasta este momento los niños querían probar de todo, ahora experimentan una pérdida de interés por los alimentos.

En esta etapa lo realmente importante no son las cantidades, sino que el niño muestre interés por la comida y que lo que coma, sea nutritivo y equilibrado. 

Pautas para que coman bien los niños de 1 a 3 años:
  1. Se recomienda desayunar siempre a la misma hora y hacerlo de la forma más completa y equilibrada posible. Un desayuno equilibrado es aquel que incluye lácteos, cereales y fruta.
  2. Si el niño rechaza un alimento, no se le debe forzar a tomarlo.
  3. Los niños necesitan comer a menudo. Algunos niños picotean entre horas, por lo que se les debe proporcionar alimentos nutritivos y saludables.
  4. Los frutos secos son peligrosos por el riesgo de atragantamiento (cacahuates, almendras, avellanas, etc.). No deben darse hasta los 4 años y siempre con precaución.
  5. Ninguna comida debería estar prohibida, a no ser que el niño sea alérgico o tenga alguna intolerancia. A los niños se les debería permitir caprichos ocasionalmente. La prohibición de ciertas comidas (chucherías, refrescos, hamburguesas, etc.) puede atraer la atención del niño hacia ellas y hacer que parezcan más atractivas y deseables.
Fuente: http://www.elbebe.com/alimentacion/alimentacion-infantil-6-pautas-para-que-ninos-de-1-a-3-anos-coman-bien

¿Estás embarazada? ¿Cuáles son los primeros síntomas de embarazo?

El síntoma más evidente de embarazo es la interrupción de la menstruación. Si estás embarazada, sentirás tus pechos más sensibles al tacto y puede que desarrolles cierta aversión hacia olores que antes tolerabas. Las náuseas y vómitos son frecuentes, así como el cansancio o las constantes ganas de orinar.

El síntoma de embarazo más evidente para la mayoría de las mujeres es la ausencia de menstruación o la amenorrea.

Aunque no siempre un retraso menstrual significa que estás embarazada. En algunos casos se trata de desajustes hormonales que provocan la ausencia de regla. Otras veces, sin embargo, significa que el bebé realmente está en camino.

La primera falta suele venir acompañada de otras señales de embarazo como una mayor sensibilidad en los pechos, cansancio y sueño excesivo, náuseas y vómitos o una necesidad de orinar con más frecuencia.

Cuando las mujeres experimentan alguno de estos síntomas surge la necesidad de confirmar la posibilidad de embarazo.

En la mayoría de los casos la mujer recurre, en un primer momento, a los test de embarazo de venta en farmacias, ya que es una prueba cuya fiabilidad es de casi el 100%. Sin embargo es el ginecólogo quién debe descartar o confirmar el embarazo.

Además de los primeros síntomas de embarazo, tampoco es raro que especialmente durante el primer trimestre del embarazo la mujer sufra rechazo ante alimentos, olores y sabores que antes toleraba.

La embarazada también puede experimentar emociones contradictorias con respecto a la maternidad, súbitos cambios de humor y estar más sensible, lo que puede repercutir en las relaciones con su pareja y con su entorno más próximo. 

Los síntomas más frecuentes de embarazo son:

La falta de regla es el primer síntoma de embarazo

¿No te ha bajado la regla este mes? La amenorrea o ausencia de menstruación suele ser un síntoma de embarazo, sobre todo en aquellas mujeres de ciclo regular. Si tus ciclos son irregulares, te recomendamos que realices alguna de las pruebas disponibles para asegurarte de que estás embarazada.

Cambios en los pechos en el embarazo

¿Notas los pechos más doloridos de lo habitual? Probablemente notes que tu cuerpo empiece a cambiar y sientas los pechos doloridos y con una sensibilidad parecida a la que experimentas días previos a la regla. El roce de la ropa te molesta, las mamas se tensan y parecen haber crecido un poco más de lo normal. El aumento del tamaño de los pechos y una mayor sensibilidad en los mismos son unos de los primeros síntomas de embarazo.

Cansancio y sueño en el embarazo

¿Te cuesta levantarte después de haber dormido ocho horas? Para otras mujeres levantarse de la cama es todo un suplicio, ya que sienten su cuerpo más cansado y pesado de lo habitual, incluso después de haber dormido lo suficiente durante la noche y echarse alguna siesta después de las comidas.

La sensación de sueño permanente, junto con la de cansancio, es otro de los primeros síntomas que tu organismo puede experimentar al principio del embarazo. Si es preciso, reduce la actividad y procura descansar lo máximo posible.

Náuseas, vómitos y mareos en el embarazo

¿Sientes el estómago revuelto y unas ganas irrefrenables de vomitar? La mayoría de las mujeres sufren náuseas y vómitos al principio de la gestación. Pueden manifestarse en cualquier momento del día, aunque preferentemente por la mañanas y en ayunas. No te preocupes en exceso, ya que estas molestias irán remitiendo a lo largo del embarazo.
En caso contrario consulta con tu ginecólogo para que observe si el embarazo se desarrolla con normalidad, y descartar lo que se conoce como "hiperemesis gravídica" (náuseas y vómitos persistentes que pueden poner en riesgo el desarrollo de tu bebé debido a la deshidratación).

Ganas frecuentes de orinar en el embarazo

¿No aguantas más para ir al baño? Tener ganas frecuentes de orinar, lo que se conoce como micción, también es otro de los primeros síntomas de embarazo si éste va acompañado de tu primera falta. En caso contrario podría tratarse de una infección de orina producida por otras causas.

Alteraciones en el sentido del olfato en el embarazo

¿Aquellos olores que te encantan ahora los aborreces? El sentido del olfato se puede ver alterado al inicio del embarazo. Los olores de determinados perfumes o alimentos incluso es posible que te produzcan náuseas o ganas de vomitar.

En cualquier caso, la visita al ginecólogo es obligada para que confirme o descarte el embarazo . En el caso de confirmarse será éste quien marque los pasos a seguir durante los próximos nueve meses, ya que no hay dos embarazos iguales.



Durmiendo con el enemigo. Violencia hacia la mujer por su pareja en México.

Autor: Carlos Canché

Era 1991 cuando la actriz Julia Roberts estrenaba la película Durmiendo con el enemigo (Sleeping with de Enemy,  Dir. Joseph Ruben) donde a manera de película de suspenso se retrataba la vida de Laura Burney, víctima de abuso de su propio esposo al grado de tener que fingir su propia muerte para escapar de su marido siendo esto último insuficiente pues finalmente la encuentra. Once años más tarde la cantante Jennifer López en su faceta como actriz, protagonizaría la película Nunca Más (Enough, Dir. Michael Apted) donde nuevamente una mujer es víctima de la violencia de su propio esposo, ante lo cual la mujer decide aprender a boxear para defenderse del hombre que eligió para vivir en pareja y que se convirtió en su verdugo.

Más recientemente la cadena Discovery estrenó en su canal dedicado a la mujer la serie ¿Con quién %&# me casé?, donde se dramatizan casos reales de mujeres que creen haber encontrado al hombre de sus sueños pero resulta que su vida se convierte en un verdadero infierno cuando descubren que el príncipe azul es en realidad el villano de la historia. 

El cine y la televisión se han dedicado a proyectar la violencia ejercida por los hombres hacia sus propias parejas, pero en estos casos la realidad siempre supera a la ficción y en una sociedad como la mexicana, pareciera que es el pan nuestro de cada día y a pesar de que se firmen acuerdos internacionales, en la práctica se hace muy poco al respecto.

La Organización de las Naciones Unidas decretó el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. En su mensaje el Secretario General Ban Ki-moon expresó: Acojo con beneplácito el coro de voces que piden que se ponga fin a la violencia que afecta a alrededor de una de cada tres mujeres a lo largo de su vida. Aplaudo a los dirigentes que están ayudando a promulgar leyes y a hacerlas cumplir, y a cambiar mentalidades. Rindo homenaje, además, a todos los héroes en el mundo que ayudan a las víctimas a sanar y a convertirse en agentes de cambio.

De acuerdo a las cifras de este organismo, la violencia contra la mujer sigue siendo una pandemia global. Hasta un 70% de las mujeres sufren violencia en su vida y en los Estados Unidos por ejemplo, el coste de la violencia doméstica supera los 5.800 millones de dólares anuales, de los que 4.100 millones corresponden a servicios médicos y sanitarios. A la vez, las pérdidas de productividad suponen cerca de 1.800 millones de dólares.

En nuestro país las cifras no son nada alentadoras. De acuerdo a un estudio llevado a cabo por el INEGI, de cada 100 mujeres en México, 47 reportan hechos de violencia por parte de su pareja, mientras que el 53 restante no mencionan este tipo de hechos durante los últimos 12 meses previos al estudio.

Se identifican las siguientes cuatro formas de violencia:

1. La emocional o psicológica, que comprende actos que atentan contra la psique de la mujer, como menosprecio, intimidación, humillación, etc.;

2. La económica, que son hechos encaminados a controlar los recursos económicos del hogar para presionar a la mujer, con acciones como amenazar con no aportar para los gastos domésticos, o criticar a la mujer por la forma en que administra tales gastos;

3. La violencia física, que afecta la integridad corporal de la mujer, como empujones, patadas, golpes, aventones, etc.; y

4. La violencia sexual, cuyo fin es la obtención de relaciones sexuales sin el consentimiento de la mujer.

Respecto a la anterior clasificación, que el mismo INEGI califica de arbitraria con fines netamente estadísticos y prácticos para el estudio, el organismo puntualiza lo siguiente: debe considerarse que por lo común las agresiones masculinas hacia su pareja son diversas, que violenta a través de distintos hechos, los que no se limitan a un solo tipo ni a una sola clase de violencia dela clasificación propuesta. Una mujer puede experimentar únicamente una clase de violencia, pero también dos o más a la vez.

De las mujeres violentadas, la agresión más común es la violencia emocional siendo esta la que permea para que se susciten otro tipo de hechos, posteriormente la violencia económica, seguida de la física y por último la sexual. Sin embargo la anterior categorización corresponde a los datos de mujeres que han sufrido más de un tipo de violencia por lo que para fines del estudio, se reportan los siguientes porcentajes de mujeres agredidas por tipo de violencia:

·         Violencia emocional únicamente: 29.5%
·         Violencia económica con emocional o solo económica: 40.6%
·         Violencia física con emocional y/o económica o solo física: 13.1%
·         Violencia sexual con uno o más de los tres tipos de violencia o solo sexual: 16.8%

El estudio encontró varios hechos considerados como violentos para cada una de estas cuatro categorías y además hizo la medición de dos aspectos importantes en cada una de estas manifestaciones de la violencia: la frecuencia con la que ocurren y la percepción valorativa que tienen las mujeres sobre estos hechos.

Violencia emocional

Entre los tipos de violencia emocional más mencionados se encuentran los siguientes hechos: Él le ha dejado de hablar (48.9%), Teniendo tiempo de ayudar, le ha dejado todas las tareas del hogar y la atención de los hijos (33.9%), Se ha enojado mucho porque no está listo el qué hacer, o cree que no cumplió con sus obligaciones (22.4%). La percepción valorativa para estos hechos para la mayoría de las entrevistadas es que No tiene importancia, seguida por un porcentaje menor que opina que es un hecho grave, siendo las menos las que los consideran muy grave, en cuanto a las amenazas de muerte  a ella o a los hijos o con armas, la mayoría coincide en que son hechos muy graves, aunque estos hechos de acuerdo al estudio son los de menor frecuencia.

Violencia económica

Los casos de violencia económica más comunes  son aquellos en donde Él le ha reclamado a ella cómo gasta el dinero (47.3%), Él le ha prohibido a ella trabajar o estudiar (35.8%), Aunque él tenga dinero ha sido codo o tacaño con los gastos de la casa (29.5%) y el hecho de que Él se ha gastado el dinero que se necesita para la casa (22.9%), siendo este último considerado como grave para la mayoría de las entrevistadas que ha sufrido este tipo de violencia en comparación con los otros que son considerados sin importancia.

Violencia física

Entre los hechos con mayor frecuencia donde la mujer ha sido violentada de manera física se hallaron los siguientes: La ha empujado o le ha jalado el pelo (73.9%), La ha golpeado con la mano o con algún objeto (51.1%), Él le ha aventado algún objeto (22.0 %), La ha pateado (17.3%). Aunque la mayoría de las mujeres considera estos hechos como graves o muy graves, algunas mujeres los consideran sin importancia.

Violencia sexual

Recordemos que la violencia sexual aunque es de los hechos violentos menos frecuentes siempre va acompañada de cualquiera de los otros tres tipos de violencia. Los hechos más reportados son: Él le ha exigido tener relaciones sexuales aunque ella no quiera (93.9%), Él la ha obligado a hacer actos sexuales que a ella no le parecen (31.5%) y Él ha usado su fuerza física para obligarla a tener relaciones sexuales (28.5%). Las mujeres que son víctimas de este tipo de violencia aunado a que han experimentado también alguno de los otros son más propensas a considerar cualquiera de estos hechos como grave o muy grave, aunque existan porcentajes muy mínimos que los consideran sin importancia que aunque no sean representativos para la muestra por el tipo de hecho el estudio los considera. Un 26.7% de estas mujeres han pensado en suicidarse.

Consideraciones finales

El estudio también revela que la mayoría de las mujeres (81%) no denuncia los hechos de violencia física o sexual, las que lo hacen acuden en su mayoría al ministerio público. Las mujeres reportan que después de la denuncia la relación mejoró (36.3%)  o que mejoró un poco (29.5%), pero otras reportan que siguió igual (20.3%), aunque un 23 % retiró la demanda o no siguió con los trámites. También es importante señalar que en promedio la mitad de las mujeres que sufren violencia no platican o piden ayuda sobre estos hechos mientras que la otra mitad si lo hace.

Lo cierto es que la violencia hacia la mujer es un hecho que en nuestro país viene acompañado de distintos factores entre los que se encuentran por un lado una sociedad tradicionalmente machista donde los roles para la mujer y el hombre están definidos como dedicada al hogar y los hijos y proveedor del ingreso económico respectivamente, trastocarlos o cambiarlos como ocurre en las últimas décadas intervienen en los hechos de violencia del hombre contra su propia pareja. Distintos hechos como la edad a la que se casan las mujeres o el número de hijos en la familia así como el nivel educativo y de ingresos, aunque no son la causa de los hechos de violencia confluyen para originarlos. Lo verdaderamente preocupante es que aunque existan los medios para denunciar este tipo de hechos, la mayoría de las mujeres no lo hace  y consideran que es mejor callarlo con la idea de que no volverán a ocurrir, vamos ni siquiera consideran pedir ayuda o platicarlo con amigos o familiares, peor aún  aquellas que no lo consideran un hecho grave.

En el marco del Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, le invitamos a reflexionar sobre estos  hechos, sobre qué le estamos enseñando a nuestros hijos y cómo podemos ayudar a las mujeres cercanas a nuestro entorno que se encuentran inmersas en estos hechos para que den el primer paso: romper el silencio.

Fuentes:

Mujeres violentadas por su pareja en México, con base en la información que proporciona la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, 2003 (ENDIREH), INGEI.

El estudio completo lo puede descargar en el siguiente vínculo:




Internet Movie Data Base www.imdb.com

Celebremos nuestras tradiciones


Malala: de Nobel a primera ministra de Pakistán.

Autor: INEZ SARKODEE-ADOO

Conocí a Malala Yousafzai en octubre de 2012. Tenía 15 años y hacía poco que se había convertido en carne de titular a raíz de ser tiroteada por un talibán cuando viajaba en su autobús escolar. Rostro conocido en Pakistán por haber hecho campaña en favor de la educación de las niñas, alguien pronunció su nombre y le dispararon tres tiros. Dos semanas más tarde se despertó en Birmingham, tras haber sido trasladada a Gran Bretaña en estado crítico. Incapaz de hablar al principio, se comunicaba con los médicos mediante un cuaderno; después de un mes era capaz de mover la cara y sonreír.

Hoy, con 17 años y residiendo en Birmingham junto a sus padres y dos hermanos más jóvenes que ella, Malala se asombra de cómo ha cambiado su vida. Lanzada a la fama mundial, las campañas de la recién elegida premio Nobel de la Paz han encontrado apoyo en todo el mundo, desde Isabel II de Inglaterra a Angelina Jolie. En su decimosexto cumpleaños pronunció un discurso en Naciones Unidas en Nueva York, donde instó a los dirigentes a emprender la lucha contra el analfabetismo, la pobreza y el terrorismo en el mundo. Después viajó a Nigeria, donde emplazó al Gobierno a asumir la responsabilidad de recuperar a más de 200 colegialas secuestradas. En su libro 'Yo soy Malala' (Alianza), afirma: "Los talibanes me dispararon para silenciarme, pero hoy el mundo entero está escuchando mi mensaje".

Nos vemos en domingo porque está estudiando en estos momentos para obtener el Certificado General de Educación Secundaria. Le queda aún un año, pero sigue una regla muy estricta acerca de la asistencia a clase. "Solo faltaré a la escuela por un compromiso que suponga un cambio de verdad", explica. "Es la cuestión que me planteo ante cada solicitud y si la respuesta es afirmativa, digo: 'Vale, sacrifico un día lectivo por la educación de millones de niños que no van a la escuela'". Está decidida a aprobar con sobresaliente todas las asignaturas del curso que viene, antes de lanzarse a por las materias que dan acceso a la enseñanza superior. "Voy a elegir letras. Nada de ciencias", aclara.

"Me pone de mal humor la imagen de la mujer occidental. ¿Qué quieren decir las letras de las canciones pop, que estamos ahí solo para ser tratadas como objetos?"

Tengo curiosidad por saber si mantiene relación todavía con sus amigas de la infancia. "Nos conectamos por Skype a todas horas", me dice. "Simplemente hablamos de las cosas normales. A veces pienso, ¿de qué charlábamos antes? ¡De nada! ¡Y de todo! Es como una conversación que no se ha interrumpido nunca. Algo parecido a: '¿Qué es de esa otra chica?' A lo que me responden: '¡Ah, se ha casado!'. Ahora la mayoría de ellas están comprometidas".

¿Cómo te hace sentir eso? "La verdad es que me dan pena", responde. "Como tienen 17 o 18 años, la ley permite que contraigan matrimonio, pero yo les he ido advirtiendo de que deberían haber seguido con su educación. El problema es que las familias de sus maridos les dicen que podrán seguir estudiando aunque se casen. Sin embargo, en muchos casos lo prometen y después no les dejan hacerlo. Más tarde tienen un hijo, el niño crece, luego llega otro bebé..., y así". ¿Te gustaría formar una familia algún día?, le pregunto. Se echa a reír. "A lo mejor. ¡Pero todavía no!". Vivir en Reino Unido representó para ella todo un choque cultural. Para empezar estaba el clima, "frío, húmedo". Cuando empezó en la escuela la invadió el desconcierto: "Tienen laboratorios informáticos, de ciencias, libros bonitos, todo lo que puedas necesitar. ¡Internet!", explica entre risas. "Antes de venir aquí jamás en mi vida había buscado nada en Google".

Hay aspectos de la cultura occidental que le han resultado difíciles de aceptar. "Me pone un poco de mal humor la imagen de la mujer. Se me hace bastante cuesta arriba escuchar música pop. Con frecuencia no entiendo las letras pero, cuando me las traducen, pienso: '¿Qué quiere decir esta canción? ¿Que las mujeres están ahí solo para ser tratadas como objetos?'. Y la mayoría de las cantantes parecen haberlo aceptado. Claro, que tienen que representar un papel", mueve la cabeza. "Y los políticos, también".

Hablamos de la apatía que aparentemente sienten nuestros jóvenes por la política. "En todos los países se considera que es una pérdida de tiempo. La verdad es que a ninguno se le ocurre decir: '¡Eh, metámonos en política!'. Otra cosa es que vivas bajo una ley que vaya en contra de tus derechos. En ese caso es mucho más probable que estés interesado en cambiar las cosas".

"La mayoría de mis amigas de la infancia están casadas o comprometidas. Yo les he advertido de que deberían haber seguido con su educación. La verdad es que me dan pena"
¿Qué consejo darías a alguien que cree que se está produciendo una gran injusticia en su entorno pero no sabe por dónde empezar para que le escuchen? "Tienes a tu alcance las redes sociales. Utilízalas. Cuando estaba en Pakistán salía en televisión. A través de ella decíamos a los políticos que queríamos recibir la educación que nos correspondía y que lo que hacen los talibanes está mal. Ahora bien, es muy difícil hablar así cuando uno de estos radicales está apostado a las puertas de tu casa. Es bastante más fácil montar una protesta en Facebook".

Reconoce que si su voz se ha oído de forma universal ha sido porque la suya fue una experiencia extrema. Pero, afirma, "en estos momentos me escuchan y me apoyan de verdad. Aunque soy consciente de que eso podría cambiar. La respuesta quizá no sea la misma en cinco o 10 años. Así que no cuento con ello. Las cosas no suceden por sí solas". Su ambición es llegar a ser primera ministra de Pakistán. Como lo fuera Benazir Bhutto, asesinada en 2007, su ídolo. Cuando estaba en el hospital, los hijos de Bhutto fueron a visitarla y le regalaron dos de los chales de la difunta política. Malala llevó uno de ellos cuando pronunció su discurso en Naciones Unidas. ¿Te preocupa tu seguridad en caso de volver a tu país? "¡Podría ir ahora mismo!", sonríe. "Lo que ocurre es que quiero recibir una buena educación universitaria. Montones de políticos han estudiado en Oxford, como Benazir. Es la mejor arma".

A pesar de las amenazas de muerte de los talibanes (que ha sufrido también su padre, quien sigue dirigiendo una escuela en Swat, ciudad originaria de la familia, y que es agregado de Educación en el Reino Unido en representación del consulado de Pakistán en Birmingham), Malala asegura no estar preocupada por su seguridad en Inglaterra. "Aquí no se pueden comprar armas, eso es bueno. Otra cosa clave es que mi familia vive con normalidad. Si tienes a la policía todo el día delante de tu casa lo único que consigues es decirle al mundo entero: 'Este es nuestro hogar'. Y por último, la realidad es que algún día tenemos que morir, no se puede impedir".

Una vez al día se comunica por 'email' con el equipo que coordina su agenda y gestiona el Fondo Malala (malalafund.org ), y todas las semanas organiza conferencias telefónicas para hablar de las campañas. En la escuela ha tenido problemas para encajar, porque nunca ha sido completamente capaz de quitarse de encima la etiqueta de 'Malala, la niña a la que los talibanes pegaron un tiro en la cabeza'. "Hago todo lo que puedo por ser una estudiante normal. Pero, de repente, alguien me dice: '¡Te he visto en la tele!'. ¡Es duro!". Y ahora, con el Nobel de la Paz en su haber, mucho más. "Esto no es el final, sino el principio", afirmó al recibirlo, para pesadilla de quienes quisieran que estuviera muerta. "Quiero ver a todos los niños yendo al colegio y recibiendo educación", agregó. Conociéndola, probablemente lo consiga. Ojalá.